Las tarjetas revolving han facilitado el acceso al crédito rápido a millones de personas. Sin embargo, la cara oculta de este tipo de financiación es menos amigable: altos intereses, cuotas interminables y una deuda que, en muchos casos, parece no tener fin. En este artículo, te explicamos por qué y cómo puedes reclamar si sientes que has sido víctima de una tarjeta revolving.
Una tarjeta revolving es un tipo de tarjeta de crédito en la que las compras o retiradas de dinero se financian de forma aplazada mediante una cuota mensual. El problema radica en los elevados intereses aplicados, que pueden superar el 20%, lo que hace que la deuda crezca más rápido de lo que se paga. Esto ha generado un ciclo de endeudamiento que afecta a miles de usuarios en España.
Desde 2020, diversas sentencias del Tribunal Supremo han declarado abusivos muchos de los intereses asociados a las tarjetas revolving. Esto significa que los usuarios que se ven atrapados en estos créditos tienen derecho a reclamar si consideran que los intereses son excesivos.
Reclamar una tarjeta revolving puede ser un proceso complejo, sobre todo si no estás familiarizado con términos financieros y legales. Además, el respaldo de un abogado especialista aumenta significativamente las probabilidades de éxito, ya que conocen las normativas y pueden asesorarte en cada paso del proceso.
En muchos casos, los usuarios que reclaman logran que el banco devuelva los intereses abusivos cobrados y reestructuren la deuda en condiciones justas. Además, reclamar ayuda a reducir el impacto financiero de una deuda que podría prolongarse indefinidamente.
Si te encuentras en una situación similar, no dudes en ponerte en contacto con especialistas